Eucaristía del Viernes 26 de Julio de 2024
Viernes de la decimosexta semana del tiempo ordinario
Santos Joaquín y Ana, padres de la Virgen María
Memoria obligatoria
Color: blanco
Una antigua tradición, que arranca del siglo II, atribuye estos nombres a los padres de la Santísima Virgen María. El culto a Santa Ana se introdujo ya en la Iglesia oriental en el siglo VI, y pasó a la occidental en el siglo X; el culto a San Joaquín es más reciente.
Antífona de entrada Cf. Eclo 44, 1. 25
Alabemos a san Joaquín y santa Ana, porque en su descendencia, el Señor Dios les concedió la bendición para todos los pueblos.
ORACIÓN COLECTA
Señor, Dios de nuestros padres, tú concediste a san Joaquín y santa Ana la gracia que de ellos naciera María, la madre de tu Hijo encarnado; otórganos, por sus ruegos, alcanzar la salvación prometida a tu pueblo. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo, y es Dios, por los siglos de los siglos.
PRIMERA LECTURA
Les daré pastores según mi corazón. Todas las naciones se reunirán en Jerusalén.
Lectura del libro de Jeremías 3, 14-17
¡Vuelvan, hijos apóstatas -oráculo del Señor- porque Yo soy el dueño de ustedes! Yo los tomaré, a uno de una ciudad y a dos de una familia, y los conduciré a Sión. Después les daré pastores según mi corazón, que los apacentarán con ciencia y prudencia. Y cuando ustedes se hayan multiplicado y fructificado en el país, en aquellos días -oráculo del Señor- ya no se hablará más del Arca de la Alianza del Señor, ni se pensará más en ella; no se la recordará, ni se la echará de menos, ni se la volverá a fabricar.
En aquel tiempo, se llamará a Jerusalén ‘Trono del Señor’; todas las naciones se reunirán en ella, y ya no seguirán más los impulsos de su corazón obstinado y perverso.
SALMO RESPONSORIAL Jer 31, 10-12b. 13
R/. El Señor nos cuidará como un pastor.
¡Escuchen, naciones, la palabra del Señor, anúncienla en las costas más lejanas! Digan: “El que dispersó a Israel lo reunirá, y lo cuidará como un pastor a su rebaño”.
Porque el Señor ha rescatado a Jacob, lo redimió de una mano más fuerte que él. Llegarán gritando de alegría a la altura de Sión, afluirán hacia los bienes del Señor.
Entonces la joven danzará alegremente, los jóvenes y los viejos se regocijarán; Yo cambiaré su duelo en alegría, los alegraré y los consolaré de su aflicción.
ACLAMACIÓN AL EVANGELIO Cf. Lc 8, 15
Aleluya.
Felices los que retienen la Palabra de Dios con un corazón bien dispuesto y dan fruto gracias a su constancia. Aleluya.
EVANGELIO
El que escucha la Palabra y la comprende produce fruto.
+ Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Mateo 13, 18-23
Jesús dijo a sus discípulos:
Escuchen lo que significa la parábola del sembrador. Cuando alguien oye la Palabra del Reino y no la comprende, viene el Maligno y arrebata lo que había sido sembrado en su corazón: éste es el que recibió la semilla al borde del camino.
El que la recibe en terreno pedregoso es el hombre que, al escuchar la Palabra, la acepta enseguida con alegría, pero no la deja echar raíces, porque es inconstante: en cuanto sobreviene una tribulación o una persecución a causa de la Palabra, inmediatamente sucumbe.
El que recibe la semilla entre espinas es el hombre que escucha la Palabra, pero las preocupaciones del mundo y la seducción de las riquezas la ahogan, y no puede dar fruto.
Y el que la recibe en tierra fértil es el hombre que escucha la Palabra y la comprende. Éste produce fruto, ya sea cien, ya sesenta, ya treinta por uno.